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LAS LAMPARAS DE CRISTAL DE SAL – LAS VITAMINAS DEL AIRE (2ª parte)
DESCONTAMINANTE ELECTROMAGNETICO
Las lámparas de cristal de sal tienen una doble función descontaminante, electromagnética y atmosférica, gracias a los iones negativos que desprenden. Actualmente, la contaminación electromagnética es la más preocupante. Geobiologicamente hablando, la electricidad no es inocente. Cuantos más aparatos, más amenazados estamos y la causa es la siguiente: la corriente alternativa distribuida a nuestras casa, oficinas, fábricas..etc, tiene una frecuencia de 50 Hertz. La frecuencia es el número de oscilaciones de los electrones que pasan por un punto fijo en 1 segundo. La corriente que pasa por un simple hilo eléctrico, incluso cuando no funciona ningún aparato, es de 50 oscilaciones por segundo. Este hilo eléctrico emite lo que se llama un campo eléctrico. Al conectar un aparato, este campo eléctrico se transforma en campo electromagnético que se propaga entorno al aparato. Una pantalla de 70 cm. de diagonal emite un campo electromagnético de 4,20 metros. Esto es un indicador para nuestra posición en relación con la pantalla que en este caso debería de ser mayor a los 4,20 metros, si estamos a una distancia inferior, las ondas electromagnéticas nos bombardearan sin darnos cuenta de ello.
En los años 70 la prensa internacional alertó al público de los resultados de dos estudios que se realizaron.
· Después de la instalación de una línea de alta tensión, en el Norte de Francia, un estudio epidemiológico concluyó que los habitantes que vivían a menos de 1,5 Km. sufrieron todo tupo de trastornos:
– Insomnio
– Disminución de la libido
– Depresión nerviosa
– Problemas cardiovasculares
– Depresión inmunitaria
– Alteración de la fórmula sanguínea (leucemias)
En plena guerra fría, en 1970, la KGB experimentó con un arma tan discreta como peligrosa sobre la embajada de los Estados Unidos en Moscú. Durante un año bombardeo la embajada con ondas electromagnéticas de alta frecuencia. El resultado fue espantoso. En pocos meses tres embajadores murieron prematuramente y el 60% del personal fue aquejado de cáncer.
Los campos electromagnéticos domésticos amenazan nuestra salud constantemente. Los riesgos ligados son múltiples:
· Disminución del índice de hierro en la sangre
· Trastornos del ritmo cardiaco
· Trastornos neurovegetativos
· Astenia
· Irritabilidad
· Depresión nerviosa
· Perturbaciones del sistema inmunitario
· Alteraciones genéticas
¿ Debemos dejar que las ondas electromagnéticas continúen bombardeándonos de día y de noche en nuestras casas?
Es suficiente dar una vuelta por una casa para levantar un acta alarmente
Frigorífico , Congelador, Placa eléctrica, Horno eléctrico, Cafetera eléctrica , Tostadora eléctrica , Robot doméstico, Lavadora , Plancha, Horno microondas , Lavavajillas
Desde hace algún tiempo el teléfono móvil forma parte íntima de nosotros. Emite una radiación cerca del oído y parte de las ondas penetran en el cerebro, como han podido demostrar los estudios epidemiológicos realizados. Es difícil que el resultado de las investigaciones salga a la luz dada la importancia económica, las inversiones y los puestos de trabajo de este sector.
¿Qué deberíamos hacer ante esta situación? ¿Deberíamos retirarnos a una isla desierta y volver al tiempo de las cavernas? Seguro que no. Hay dos opciones a realizar.
– Primero, detectar las ondas nocivas
– Segundo, tomar precauciones, si es posible.
En el mercado se encuentran ciertos aparatos capaces de detectar y medir los campos electromagnéticos.
Para proteger las casas están las lámparas de cristal de sal que neutralizan las radicaciones nocivas. Los iones negativos emitidos por las lámparas actúan como una pantalla protectora.
Las lámparas de cristal de sal ayudan a disminuir la contaminación electromagnética en las casas y lugares de trabajo.
Solamente por esta razón hay que estarles agradecidos.
Articulo extraído del libro LAS LAMPARAS DE CRISTAL DE SAL – LAS VITAMINAS DEL AIRE
Autor Jean-Paul Jacquemet
LAS LAMPARAS DE CRISTAL DE SAL – LAS VITAMINAS DEL AIRE (1ª parte)
PODER SIMBÓLICO DE LAS LÁMPARAS DE SAL DEL HIMALAYA
La Sal del Himalaya es una pura maravilla procedente de la región del planeta menos contaminado. Es una sal que data de la era secundaria, simboliza la pureza, la purificación, la protección, la regeneración y la perfección. Estas cualidades que poseen las lámparas de cristal de sal son las que purifican la atmósfera de la habitación donde se encuentran regenerándola y consiguiendo un mayor bienestar para las personas que respiran a su alrededor. Los japoneses no se equivocan en cuanto a las virtudes protectoras de la sal para su hábitat. Colocan pequeños montones de sal en las cuatro esquinas de sus casas y además cada día esparcen sal en el umbral con el fin de purificarse al entrar. También los luchadores de sumo cuando entran al ring, echan un puñado de sal al suelo en señal de purificación con el fin de que el combate se realice con una lealtad perfecta de espíritu.
Se utiliza en ceremonias de la religión sintoísta y cristiana. En el bautizo el sacerdote efectúa dos rituales, sumerge al bebe en el agua y le coloca sal en los labios para borrar los estigmas del pecado original. En numerosas civilizaciones se frota a los recién nacidos con sal para purificarlos, protegerlos y fortalecerlos. En la época de los romanos, la cicatrización del ombligo después del nacimiento, se activaba con una aplicación diaria de sal. Plinio escribió que la sal permitía cicatrizar y curar una mordedura de serpiente o una picadura de escorpión. En la época de los griegos, los hebreos y los árabes la sal era un símbolo de hospitalidad y amistad. Cuando había invitados se colocaba sal en el centro de la mesa. Una antigua costumbre obligaba a recibir al invitado, en el umbral, con pan y sal en muestra de fraternidad y comunión.
La sal simboliza también la incorruptibilidad además de tener un poder indestructible. Cuando Cristo dijo a sus apóstoles: “Vosotros sois la sal de la tierra” evocó un símbolo fecundante, signo de vida y de luz. La sal acompañó también dos sacrificios, en numerosos antiguos rituales, antes de incinerar a los animales se les purifica con sal. Para los alquimistas de la Edad Media, la sal era el campo de la vida, producto residual de la dispersión del agua por evaporación, sutil transformación asociando los cuatro elementos: tierra, agua, fuego y aire. En la doctrina hermética, la sal era la consagración del campo en su perfección, sal sagrada, mediador entre lo natural y lo sobrenatural.
La lámpara de sal no es un objeto cualquiera puesto que está cargada de símbolos positivos. El color naranja que le confiere, encierra todas las propiedades de este color:
- Es un color cálido e intimo.
- Evoca el sol, el calor y la luz.
- Favorece la calma y la relajación.
- Desarrolla la reflexión, la concentración y la introspección.
- Crea un ambiente acogedor, tolerante y tranquilo.
- Estimula la sexualidad.
- Mejora la digestión.
- Potencia el placer de vivir.
- Produce una sensación de fuego y de oro.
- Aumenta la energía.
- Es el color de la benevolencia y del encanto.
- Hace a las personas vigorosas y saludables.
El aire que respiramos, esta esencialmente constituido de moléculas formadas por átomos equilibrados, es decir, que la carga positiva de sus núcleos es igual a la carga negativa de los electrones que gravitan alrededor de núcleos. El problema, en la naturaleza, es que los átomos son muy inestables y tienen tendencia a ganar o a perder un electrón muy fácilmente. Un átomo que gana o pierde un electrón cambia de nombre y se convierte en un ion. La calidad o la nocividad del aire dependen de la proporción recíproca de iones negativos e iones positivos que se encuentran en el aire.
Un exceso de iones positivos en la atmosfera que respiramos provoca todo tipo de trastornos patológicos:
- Dolores de cabeza.
- Cansancio crónico.
- Stress.
- Insomnio.
- Alergias.
- Depresión.
- Dolores reumáticos.
- Problemas digestivos.
- Perturbaciones metabólicas.
- Disfunción hormonal.
- Disfunción del tránsito intestinal.
- Pérdida de memoria
- Falta de concentración.
- Envejecimiento acelerado del organismo.
- Disminución de la libido.
- Inmuno depresión del organismo